viernes, 5 de julio de 2019

Los Gigantes a lo largo de la historia



Las leyendas e historias de la mayoría de culturas y civilizaciones de la antiguedad tienen a los gigantes como protagonistas. Vayamos por dónde vayamos la figura del gigante se repite por doquier, sea en Europa, América, Africa o Asia. Pero hay que tener en cuenta que estamos ante un tema que implica reconocer que el Homo Sapiens no es el rey del mambo en este lindo Planeta que habitamos. Por tal motivo muy pocos museos del mundo tienen el honor de exhibir restos de gigantes. La mayoría de pruebas encontradas se encuentran guardadas en almacenes privados y permanecen ocultas al mortal.

En muy pocos libros antiguos puede encontrarse documentación y datos del fenómeno de los gigantes en la tierra. La mayoría de pruebas y vestigios han sido borrados del mapa de forma literal. El detalle del grabado con el que hemos empezado este artículo pertenece a uno de los pocos relatos en latín que ha llegado a nuestros días sin ser quemado o ocultado. Pertenece al libro del jesuita Atanasio Kirsher publicado en Amsterdam e impreso en latín en 1678 con el título de Mundus Subterraneus.

En este libro en latín el bueno de Atanasio recopila todos los casos de gigantismo que habían sido reportados en crónicas y misivas que los jesuitas escribían "a su central" desde los nuevos territorios conquistados por la fuerza de la cruz, la pólvora y la espada.

En el grabado de dicha obra en latín, se muestran de forma proporcional las diferentes alturas de los hallazgos más relevantes que hasta la fecha habían sido registrados por la orden fundada por Loyola. En el grabado sorprende la impresionante altura del sujeto más alto de todos ellos. Se trata del ejemplar encontrado en el interior de una cueva de la falda del Monte Erice con 600 palmos de altura (120 metros) y que fue reportado en 1365 por Giovanni Boccaccio en su obra titulada "Geneaologia degli Dei". Los aldeanos de Sicilia cuentan que se trataba de los restos de Polyphemus un legendario monarca de gigantescas proporciones que gobernó la isla bajo el nombre de "Rey de Erice".


En el ranking de altura de cada uno de los gigantes representados en el grabado, le sigue el llamado "Gigante de Mauritania" relatado en las famosas crónicas de Plinio con 180 palmos de altura (36 metros) y el "Cadaver de Creta" con 138 palmos de altura (27.6 metros). A continuación, la tabla nombra al "Gigante de Helvetia", que con 27 palmos de altura (5.4 metros) es de los pocos esqueletos que se pueden contemplar actualmente en un museo suizo.

El penúltimo no es otro que el famoso gigante Goliath con 19 palmos de altura (3.8 metros) y en ultimo lugar se puede observar una diminuta silueta humana. Corresponde al ser humano actual que en el grabado es llamado "Homo Ordinarius". Como se puede comprobar en la siguiente ampliación del grabado, La altura del "Homo Ordinarius" equivale a la longitud del dedo gordo del pie del Rey de Erice.


De pequeños aprendimos que los seres humanos estábamos situados en el top de la pirámide de los seres vivos. El grabado anterior nos cuenta una historia completamente distinta que nada tiene que ver con lo que la ciencia oficial nos cuenta. Por tal motivo, muchos mitos cuentan la historia de un modo muy diferente al oficial.

En la mayoría de las historias antiguas de la creación, suelen haber unos gigantes que son los encargados de construir las montañas, los valles y trazar el cauce de los grandes ríos. La grandiosidad de Mama Natura fue la que hizo pensar que algo tan magnífico solamente podía haberlo realizado una raza de gigantes. Podríamos decir que los gigantes están asociados a la historia desde la propia creación del Mundo.


En las tablillas sumerias que relatan la creación del mundo, ya encontramos que los dioses Anunnaki para crear el mundo utilizan unos dioses inferiores llamados Igigi, muy trabajadores, de gran estatura y gran fuerza.
"En aquellos días cuando el Alto y el Bajo habían sido separados por Nammu
Todos los destinos de los dioses fueron designados
y todos los dioses se pusieron a trabajar
Los dioses de segundo rango ocuparon los trabajos más pesados,
Cavaban los canales, amontonaban la tierra y molían grano
mientras los dioses superiores solo hacían que dormir y descansar".
Llegados a este punto los dioses inferiores empezaron a cansarse de la situación y pidieron clemencia a Nammu, la Madre Primordial, la Generadora de todo. Sin ningún lugar a dudadas, se trata de la primera rebelión de los trabajadores de toda la historia, con huelga incluida. Fue entonces cuando Nammu se dirigió a su querido hijo Enki y le transmitió todas las quejas de los dioses inferiores.

Las palabras de Nammu dirijidas a su hijo predilecto no tienen desperdicio, ya que recuerdan los discursos de todas nuestras madres cuando se nos "pegaban las sábanas".
"Tú permaneces acostado y durmiendo
sin interrumpir tu sueño
Pero los dioses, mis queridas criaturas protestan!!!!
Deja tu lecho, hijo mío, haz uso, con inteligencia de tus talentos
y fabrica unos sustitutos para que así, los dioses puedan dejar de trabajar."
Después de estas palabras las tablillas nos cuentan que Enki se levantó de la cama y confeccionó un molde con el que fabrico al ser humano. En esta delicada operación Enki fue ayudado por Ninmah y como auxiliares intervinieron Ninimma, Suzianna, Ninmada, Ninmug y Musarga. Así que según las tablillas sumerias, el actual Homo Sapiens fue creado para que sustituyeran a los dioses gigantes en la ardua tarea de crear el mundo. Como podéis comprobar, la historia de que el hombre nace para ser esclavo y obrero viene de muy lejos.

La diferencia de altura entre los dioses y los humanos ha quedado reflejada en multitud de sellos y pinturas sumerias, acadias y egipcias. En la mayoría de dibujos de la época, los seres humanos aparecen atados con collares y correas a las manos de los gigantes, dándonos a entender que el ser humano es un puto esclavo del gigante que se hace pasar por dios. He aquí unos claros ejemplos donde la diferencia de altura entre las dos razas es evidente:





La propia Biblia en el Genesis también nos habla de que en el principio habían gigantes conviviendo con el ser humano. Los libros sagrados nos cuentan que en los primeros tiempos el ser humano convivió con gigantes, los Nephilim. Eran unos gigantes muy espabilados que siempre jugaban con clara ventaja frente a los hombres. Los gigantes Nephilim cuando vieron la belleza de las mujeres, no dudaron en cepillarse a las mejores y los hombres se tuvieron que quedar con las feas.Y es que siempre nos quedamos con las migajas de todas las cosas,... así nos va.

Pero esto no es todo, no tan solo nos jodieron las mujeres,... la Biblia nos cuenta que las mujeres quedaron preñadas y que parieron "hombres valientes que todos ellos llegaron a ser varones de renombre".

Osea que nos joden a las mujeres y los hijos que engendran son los que luego nos gobiernan y dirigen.
Joder con los Nephilim!!!!!!


Antes de que David matara al gigante Goliath, fueron muchas las descendientes de Eva que se aparearon con los Nephilims. Con respecto a la gran diferencia de tamaños y diámetros entre un pene Nephilim y una vagina del Homo Sapiens femenino,...... la Biblia no dice nada. Es una de las incongruencias que los sacerdotes no saben responder al ser preguntados al respecto.

O los gigantes Nephilim tenían un pene enano,... o aquí hay algo que no cuadra.



En la mitología griega los gigantes son unos seres monstruosos nacidos de la unión que Gea mantuvo con el Tártaro. Tenían una gran fuerza y se rebelaron contra el Olimpo cuando Zeus encerró a los Titanes en el Tártaro. Para combatir usaban antorchas encendidas y sus armas preferidas eran los pedruscos que al caer sobre la faz de la tierra y el mar crearon las montañas y las islas.

En tiempos remotos las leyendas cuentan que los gigantes también construyeron su particular versión de la Torre de Babel, con la que querían alcanzar el Olimpo de los dioses superiores. Pero en aquellas tempranas edades la torre de los gigantes no fue construida como la que más tarde los humanos construyeron en Babel. Los gigantes solamente fueron amontonando grandes piedras una encima de las otras e intentaron formar una gran montaña de piedras con las que alcanzar el Olimpo.

En el arte la rebelión de los gigantes y su famosa batalla se transformó en la llamada Gigantomaquia que fue tema favorito en la literatura durante siglos y paso a decorar una gran cantidad de frontis en los templos griegos y romanos.


Las historias de la cultura celta y los mitos nórdicos están repletos de gigantes que suelen representar las fuerzas del caos y todo lo negativo, a la que todos los dioses se enfrentan con el fin de poder mantener en orden su universo. El misterioso paisaje helado del norte siempre ha estado relacionado con la famosa figura de los Gigantes Helados que no son más que personificaciones de las caprichosas formas de las masas de hielo árticas.

Los mitos de los Gigantes Helados han tenido una larga supervivencia en todos los países del norte de Europa. Con el paso de los siglos han ido perdiendo su carácter temible, para pasar a ser traviesos y amables. En algunos países es llamado "Herr Winter" y en Navidad desciende  de las montañas con regalos y caramelos.


Los dioses siempre se protegían y luchaban contra los gigantes, aunque en ocasiones encontramos episodios en dónde el amor carnal surge y muchos dioses se casaron con gigantas. Como ejemplo podemos citar al dios Freyr que se casó con Gerd que era hija de un gigante, o al dios Njord que se casó con la hija de un gigante llamada Skadi. Hasta el famoso Odín descendía de un gigante y se relacionó en diversas ocasiones con gigantas.

Uno de los gigantes más populares fue Hrungnir que retó a Thor a un duelo. Entre los gigantes más poderosos destacó Utgarda-Loki, apodado "señor de los gigantes", por tener artes mágicas con las que pudo burlar a Thor. También tenemos al gigante Thjazi que fue el que robo las famosas manzanas de oro de la juventud.

Otro de los gigantes nórdicos más popular es "Ymir" que fue creado dentro del Abismo Abierto por un clima tan templado como el aire en calma, allí donde la escarcha se juntaba con el calor y se fundía. De las gotas fermentadas de dicha fusión, cobró vida la imagen de un gigante de nombre Ymir y que los Gigantes Helados le llamaron Aurgemir.

Ymir se alimentaba con leche de la vaca primigenia llamada Nutricia. Ya de mayor peleó con los hijos de Bor y de la brutal herida que le hicieron, brotó tal caudal de sangre, que todos los Gigantes Helados se ahogaron. De hecho la herida fue mortal y se dice que de la carne-tierra de Ymir brotaron unos extraños y diminutos seres que acabaron convirtiéndose en una nueva raza de seres, los enanos.


Los gigantes buenos y beneficiosos en Europa del Norte suelen ser de sexo femenino, como la giganta Grid que fue la que regaló a Thor un báculo y un cinturón que le proporcionaron gran fuerza en cierta ocasión muy comprometida. Otra giganta fue Jarnsaxa con la que el propio Thor tuvo relaciones y le engendró dos hijos. En la leyenda de Branwen encontramos a la giganta Cymidei Cymeinfoll

El continente asiático también esta repleto de relatos religiosos y leyendas que nos hablan de dioses gigantes. Uno de ellos es Mahaball, el Gigante del Indostán que tambien es llamado Bali, señor y soberano de los 3 mundos: cielo, tierra e infierno. Temerosos los dioses de su poder, trataron de vencerle, encargando á Visnú la misión. Este, metamoforseándose en un enano y tomando el nombre de Vamana, se presentó ante el enorme Mahabali, y le suplicó humildemente que le concediera en soberanía, tres pasos tan solo de terreno.

El gigante se rió grandemente de la petición del pequeño Brama y accedió a sus deseos. Entonces Visnú, recobrando su verdadera forma, abrazó con un paso el cielo, con otro la tierra y con el tercero los infiernos. Aterrado el gigante, cayó a sus pies y reconoció su autoridad.

Por un acto de clemencia, Visnú le cedió el tenebroso imperio. Si se recuerda que Siva es el verdadero rey de los infiernos, deberemos necesariamente deducir, en conclusión, que Mahabali es la personificación misma de este dios.

Otro de los continentes con tradición de gigantes es el americano, lugar donde tambien se encuentra uno de los institutos de la familia Smith más polémicos y controvertidos con todo lo referido a los gigantes encontrados en suelo americano. Todo lo que no encaja con la ciencia oficial simplemente desaparece del mundo de los vivos.

Pero a pesar de las ocultaciones de la familia Smith, la cantidad de evidencias es abrumadora, con todo tipo de tamaños y localizaciones de los esqueletos encontrados, tal y como muestra la siguiente imagen:


Los dibujos en la arena de los indios nativos de Norteamérica suelen mostrar personajes con alturas muy diferentes. En el siguiente ejemplo podemos comprobar como los sujetos representados tienen diferentes alturas y los más altos rodean a los bajos que se sitúan sobres las 4 aspas de la cruz central.


En América encontramos leyendas e historias relacionadas con gigantes desde la actual Canadá hasta Tierra de Fuego. En la mitología de los nativos norteamericanos esta muy extendida la historia del Coyote y el Gigante.
"Hace mucho tiempo, asolaba la tierra unos gigantes aficionados a comer niños. Un día el Coyote atravesaba un paraje rocoso cuando se topó con uno de ellos y decidió darle una lección por su crueldad".
La historia del Coyote y el Gigante recuerda tiempos remotos en que el ser humano compartía la Tierra con los que tenían una gran afición a comer la carne tierna de los seres humanos jóvenes. El clásico tributo que el pueblo tiene que pagar para que la ira hambrienta del gigante no provoque desgracias personales.

Las crónicas de los europeos que colonizaron Norteamérica nos cuentan que cuando llegaron al territorio de la actual Virginia, pudieron comprobar que estaba habitado por una raza de gigantes que denominaron los Sasquesahanougths. La altura de estos indígenas nativos de Virginia sobrepasaba los tres metros y medio. El aspecto y forma de vestir de esta raza ha quedado reflejada en el grabado de la parte superior derecha de este mapa de Virginia del año 1608.


Los incas contaron a los españoles que sus orígenes ancestrales y míticos se encontraban al sudeste de Cuzco, en las cercanías del lago Titicaca, donde Viracocha creó un mundo de oscuridad habitado por una raza de gigantes que Viracocha había esculpido en piedra.

Pero estos primeros gigantes desobedecieron a su creador y en castigo Viracocha los volvió a convertir en piedras como las famosas figuras de Tiahuanaco y Pucara. Solo sobrevivieron un hombre y una mujer tras una gran inundación que Viracocha provocó, es la versión "andina" del Gran Diluvio Universal en dónde solo Noe y los suyos se salvan.

Las crónicas de los colonizadores del Cono Sur americano relatan a una serie de indígenas nativos de la zona que llegaban a los tres metros de altura y vivían de forma muy rudimentaria y primitiva en la Patagonia andina. En el grabado adjunto podemos a preciar las diferencias tan notables de altura entre un europeo y una pareja nativa con su recién nacido.

Los gigantes de forma arquetípica los tenemos incrustados en nuestro coco desde que empezamos a andar y hablar. Los cuentos infantiles son los culpables de que todos nosotros llevemos el arquetipo del gigante que vive en un castillo y se alimenta de niños. Se trata de utilizar nuestros miedos mientras de pequeños somos educados, una práctica que suele resultar traumática y muy poco educativa.

"Como no te portes bien vendrá el gigante y te llevará a su castillo para comerte".

Educar mediante miedos puede ser muy cómodo para el adulto que imparte dicha educación. Pero cuando eres pequeño los miedos pueden acarrear graves problemas secundarios de toda índole.

Bajo este contexto los gigantes y los dragones van de la mano en cuestión de secuestrar doncellas y tiernos zagales. La única diferencia es el lugar en dónde se perpetra el acto caníbal, los dragones en sus cuevas y los gigantes en sus castillos.

Seres que viven en cuevas y castillos remotos que conviene tener contentos con todo tipo de ofrendas y sacrificios, ya que en caso contrario, las consecuencias para la comunidad son terribles. Toda una comunidad aterrorizada por un solo sujeto amante del peor tributo: la carne humana. Por tal motivo en todos los cuentos el gigante es presentado como un ser terrible que de normal no tiene nada. Suelen tener deformaciones, jorobas, varios brazos o cabezas,... el miedo es el objetivo final que debe inyectarse a todo joven lector de cuentos.


Las historias de gigantes y dragones se parecen tanto que hasta en estos cuentos los gigantes tienen varias cabezas, como si del dragón y las 7 cabezas de la Apocalipsis se tratara. El final de todos estos cuentos infantiles con gigantes y castillos siempre acaba como la lucha entre David y Goliath. El que mata finalmente al dragón no es un veterano guerrero curtido en mil batallas. El que mata a la bestia es el más pequeño de la comunidad haciendo cumplir el famoso dicho de que "en el frasco pequeño es donde está la buena confitura".

En otras palabras, acaba ganando el que menos posibilidades tenía "a priori", en toda la comunidad. La victoria del débil frente al forzudo que atemoriza a todo dios, un potente arquetipo que se remonta a la noche de los tiempos. La comarca vuelve a la tranquilidad gracias al que menos se pensaba.



Como no podría ser de otro modo, el fenómeno de los gigantes ha sido explotado por el ser humano para satisfacer su afán de ser rico. Esto ha provocado que muchos gigantes, vivos o muertos, hayan sido mostrados en ferias itinerantes a cambio de pagar una entrada. De todos ellos uno de los más famosos es el que viajo por USA dentro de un enorme ataúd de madera y un vagón de tren, cuya foto fue publicada en 1895 en una revista norteamericana.


Otro de los gigantes que fue noticia en periódicos y revistas de la época fue el de Cardiff. Pero la mayoría de ellos no han llegado a nuestros días ya que desaparecieron, se perdieron, fueron confiscados o calcinados. Parece ser que hay dos interesados en hacer desaparecer a los gigantes de la faz de la tierra. Uno es el Vaticano y el otro un instituto americano aficionado a defender las santas escrituras.


En los siglos 18 y 19, el fenómeno de los gigantes fue explotado en toda clase de espectáculos junto a mujeres barbudas y hombres con dos cabezas. Ser un gigante se convirtió en sinónimo de tener trabajo asegurado en dichos espectáculos. Alguna de estas personas gigantescas incluso llegaron a ser ricas y alternar en la alta sociedad de la época, tal y como se muestra en estas fotografías y grabados:






Pero no todas estas personas de grandes proporciones tuvieron la suerte de trabajar en una lujosa sala de espectáculos de París o Londres como si lo hizo Babil & Bijou, la reina gigante del Amazonas. La mayoría de ellas fueron vilmente explotadas, vivieron en condiciones pésimas y en muchos casos llegaron a estar encadenadas. La curiosidad nos corrompe y elimina toda escala de valores.

En muchas localidades europeas los gigantes en la actualidad siguen siendo protagonistas en las fiestas y celebraciones locales. La costumbre viene de muy lejos y consiste en hacer pasear al son de la música por las calles y plazas una serie de grandes figuras construidas sobre un gran esqueleto de madera que reproducían en gran tamaño a diferentes personajes ricamente vestidos y adornados. Una persona desde la parte interior del esqueleto levanta a cada una de las figuras y las pasean por la villa.


La participación de gigantes en los desfiles y fiestas populares es una costumbre muy arraigada en mi Cataluña natal. Se tiene constancia que en los viejos rituales de los pueblos celtas se construían figuras gigantinas con cañas, maderas y todo tipo de elementos vegetales. Las crónicas de Julio Cesar, Diodor de Sicilia y Estrabón cuentan como en el interior de la figura se introducían animales y que finalmente todo acababa en llamas como acto de sacrificio hacia las divinidades de turno. En la región pirenaica de Louchon eran las serpientes el tipo de animal preferido para quemar dentro del gigante. Se trata de quemar una vez al año a la representación del mal, con la esperanza de que el bien ocupará su lugar y que todos vivirán felices un año entero.

Muchas de estas costumbres de quemar gigantes fueron prohibidas en las grandes urbes, ante el peligro que ello implicaba. Pero se sabe que en el mismo Londres en el siglo 16 era costumbre que en la vigilia de San Juan salieran a las calles todo tipo de gigantes, dragones y todo tipo de monstruos que luego quemaban por completo.

La noticia documentada más antigua sobre la construcción de gigantes de madera data del siglo 14 y se refiere a la ciudad flamenca de Poperinghe. La expansión medieval de todos los gremios de aquella época fue la que provocó que esta costumbre se extendiera por toda Europa. En España la costumbre de pasear los gigantes esta asociada a la celebración de la Fiesta del Corpus y a la Fiesta Mayor anual de cada ciudad importante.


Pero los anteriores tres cronistas también nos cuentan que en ocasiones eran seres humanos los que se quemaban en el interior del gigante. Solían ser ladrones y asesinos que llevaban mucho tiempo en prisión. En otras ocasiones eran prisioneros de guerra los que acababan calcinados junto al gigante en medio de la plaza de la villa. Diodor de Sicilia califica a estas costumbres como muy crueles e inhumanas, solamente propias de pueblos que no respetan la vida de los prisioneros capturados en tiempo de guerra.

Ya hemos visto como en la antigüedad todos los gigantes fueron explotados cruelmente en ferias y exhibiciones privadas. Los tiempos ha cambiado y en la actualidad los gigantes son personas famosas y ricas gracias a un invento llamado "NBA".

Con este invento americano, dos gigantes catalanes que son hermanos tienen la vida solucionada entre tanto mate, tanto triple y tanto tapón.

Johnny McClue 2019


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