sábado, 15 de diciembre de 2018

El morueco, símbolo fecundo y reproductor




Un morueco es un carnero destinado a la reproducción y forman parte del ganado lanar. En sus representaciones suele destacar sus curvados cuernos. Es el emblema utilizado para representar al signo de Aries, una cabeza de carnero con sendos cuernos. Aries es el primero de los signos del zodiaco, pertenece al elemento Fuego y esta regido por el planeta Marte.

El morueco es el emblema del Amón egipcio, que era el dios del aire y de la fecundidad. Cuando los egipcios conquistaron Kush identificaron a su principal deidad como Amón y lo representaban como una cabeza de carnero lanudo y cuernos curvos que simbolizaba a la virilidad. Con el tiempo se convirtió en una deidad de la fertilidad.

En la mitología clásica el morueco es también emblema de Hermes que en ciertos misterios se nos presenta como Krioforo, el portador del morueco, donde el carnero es transportado sobre el cuello del joven y esbelto portador.


El morueco esta relacionado con el regente del Fuego, Agni. En el yoga tántrico el "manipurachakra" tiene por símbolo el morueco que corresponde al elemento Fuego. El sabio Indra enseña la doctrina de la Unidad del Principio Supremo bajo la metamorfosis de un morueco. 

"Me he transformado en morueco para tu felicidad.
Tu has alcanzado el camino de la Ley para tu bienestar.
Accede pues a mi naturaleza única.
Soy la bandera, soy la inmortalidad.
Soy el lugar del mundo, lo que fue, es y será.
Yo soy tú, soy yo y tú.
Comprende que tú eres yo.
No hay duda por efecto de tu alma demasiado simple.
Soy yo solo lo que existe aqui abajo."

Para el pueblo dogon, el morueco desempeñaba la función de divinidad agraria y también simbolizaba a la fecundidad. En el antiguo Egipto el dios alfarero denominado Knum se creía que había modelado toda la creación, era el dios morueco por excelencia responsable de la procreación. Se han encontrado multitud de moruecos momificados ya que los egipcios pensaban que en ellos residían las fuerzas que aseguraban la reproducción de los vivos. Con sus cuernos se confeccionaban coronas mágicas que solamente utilizaban los dioses y los reyes.


En la cultura griega el morueco simbolizaba el centro de la potencia fecundadora. Entre los dorios Apolo, divinidad pastoral, se representaba en forma de morueco y se adoraba como dios del morueco llamado Karneios. Era considerado guardián de los rebaños y un gran protector contra todo animal salvaje que fue muy honrado en Esparta. Para la cultura gala el morueco estaba intimamente relacionado con el hogar.

La psicología moderna ve al morueco como el representante de la potencia. Es el ariete que permite abrir puertas, romper muros y conquistar plazas. La forma espiral de sus cuernos comporta una idea de evolución y refuerza el valor de abertura e iniciación evocada por la majestuosa V de toda cornamenta.

El mito el morueco esta dotado de verbo y de razón, simbolizando la fuerza psíquica y sagrada. Su fuerza de penetración si no se sublima, queda como fuerza ambivalente que puede fertilizar,... pero también puede destruir.

Johnny McClue 2018

miércoles, 12 de diciembre de 2018

Teresa Forcades y Josep Pamies en Argentona despertando al rebaño humano - dec. 2018


Esta semana la Asociación de Campesinos del Maresme organizó en el Teatro de la Plaça Nova de Argentona una conferencia con dos ponentes de excepción: Teresa Forcades y Josep Pamies. En dicha conferencia Josep Pamies volvió a lucir la famosa camiseta blanca con el mensaje, "El MMS no es lejía".

Sin la colaboración de los ayuntamientos es imposible que la temática que defiende Teresa y Josep llegue al gran público. En los últimos meses hemos podido comprobar como muchos medios de comunicación han acusado a Pamies de curandero y de estafador. Ya que los medios de comunicación no están mucho por la labor, los espacios municipales son vitales para que el mensaje de Josep Pamies y Teresa Forcades sea conocido.

El ejemplo dado por el Ayuntamiento de Argentona tiene que servir para que los alcaldes y demás políticos pierdan sus estúpidos miedos y permitan la celebración de este tipo de actos gratuitos y sin ánimo de lucro.

La última serie de cuantiosas multas impuestas a Josep Pamies hubieran hecho callar a cualquiera, pero a juzgar por lo que vimos en Argentona, al bueno de Josep Pamies estas multas le han dado alas. El teatro de Argentona se llenó hasta la bandera con 400 personas dispuestas a escuchar verdades, tal y como ya rezaba en catalán el cartel que lucía en el exterior del teatro: "La VERDAD necesita ser dicha porque si no se dice no existe":


Por unos momentos pensamos que en el último instante el Ayuntamiento de Argentona se había "acojonado", ya que el teatro permaneció cerrado hasta el último momento. Pero los campesinos del Maresme no faltaron a su compromiso y los seguidores de Pamies tampoco.

En Argentona pudimos presenciar una Teresa Forcades y un Josep Pamies pletóricos y con más energía que nunca. Las multas solo han dado más energías a un Josep que esta dispuesto a ir a la cárcel. Dice que la cárcel puede ser un excelente lugar en dónde sembrar una semilla que al germinar revolucione a todo el Planeta.

Afortunadamente el mundo académico y científico empieza a apoyar las verdades que Teresa y Josep hace tantos años que predican. Entre los 400 asistentes al acto con entrada gratuita se encontraban muchos médicos, químicos e ingenieros medioambientales.

No cabía ni un alfiler:


La conferencia se efectuó en catalán, pero tengo el placer de poder compartir una conversación en castellano que Josep mantuvo antes de empezar el acto con un médico asturiano en la plaza donde se encuentra el teatro. Es una excelente oportunidad para poder conocer como Josep es reconocido y admirado por un número cada vez mayor de académicos. En dicha conversación  se ponen varios "dedos" en diferentes "llagas".


En toda la historia de la humanidad no se ha producido ninguna revolución que no haya costado sangre, dolor y muchas lágrimas. Las revoluciones pacíficas son una quimera que han tenido obsesionado y muy entretenido a más de un seguidor de la llamada "Nueva Era".

La asociación que en su día fundaron los amigos y defensores de Josep Pamies se llama "Dolça Revolució", expresión catalana que significa "dulce revolución". La primera vez que escuche su nombre ya pensé, "Josep Pamies y sus amigos no deben saber que es imposible realizar una revolución de forma dulce, tranquila y amistosa".


Pero ya han transcurrido decenas de lunas desde que la "Dolça Revolució" se puso a andar y el camino de esta andadura ha demostrado que cuando te revolucionas de forma "guai", solo haces que recibir guantazos por todos lados. Al bueno de Josep le han caído hostias de Hacienda, de Justicia, de Gobernación, de Sanidad,... solo falta que ponga sanciones el de Deportes.

Josep Pamies en Argentona explico a la audiencia que al jubilarse y entrar en la tercera edad, se siente como un verdadero adolescente que siempre llevan la contraria a todo dios y disfrutan con el enfrentamiento. La ministra de Sanidad con tanta persecución solamente ha conseguido que Pamies tenga más energías que nunca. La batalla solo ha comenzado y Josep sabe que el camino que falta por recorrer, ... es muy largo.

Pero Josep Pamies no puede hacer la revolución que pretende mientras no seamos conscientes de que todos somos Josep Pamies. Para ser como Josep hay que estar dispuesto a ir a la prisión y ser conocedor de que te estas jugando tu propia vida. Desgraciadamente, son muy pocos los que están dispuestos a correr riesgos por una causa en la que te juegas tu propio cuello (recordemos el caso de Andreas Faber Kaiser). Y ahí está la clave: sin amarguras, una revolución es imposible de realizar. Una revolución no puede ser dulce.
Una revolución tiene que ser amarga, ya que de lo contrario en lugar de revolucionar, solamente agilipolla.

Una revolución solo puede tener éxito cuando los hombres y mujeres dejan de tener miedo porque viven y actúan con plena Conciencia. Un grupo de seres humanos plenamente conscientes son imparables.

Josep Pamies y Teresa Forcades ya hace años que van pregonando verdades como puños. Solamente hace falta que todos nosotros los acompañemos en su lucha. Solos, poca cosa podrán hacer, pero si todos nos unimos, esto no podrá pararlo nadie.

No podemos dejarlos solos y que terminen como Andreas Faber Kaiser. 

Debemos ser conscientes de que todos somos Josep Pamies.

Es el mejor homenaje que le podemos hacer al gran Faber-Kaiser.

Johnny McClue 2018


martes, 11 de diciembre de 2018

La capucha o caperuza


La capucha simboliza la fuerza espiritual y el poder de concentrarse y ocultarse. La capucha forma parte de la cuculla, un modo de vestir que fue muy utilizado en la Galia. Se trataba de una capa con capuchón de una sola pieza.

La vida en los monasterios también ha sido una gran amiga de usar la capucha como así lo vemos en la mayoría de los hábitos de frailes y ermitaños. La capucha invita al recogimiento interior, te aisla del exterior y te oculta. Debajo la senda capucha puede haber desde un rey a un pordiosero. La capucha es sinónimo de anonimato. La capucha del ermitaño de la carta del Tarot número 9, nos recuerda que la capucha y la espiritualidad van juntas por la vida.



Muchos personajes mitológicos de la cultura celta los vemos representados con una senda capucha, el dios irlandés Dagdá es uno de ellos. La capa y la capucha que utiliza Dagdá esta relacionada con el mito de la invisibilidad. La leyenda nos cuenta que en realidad Dagdá llevaba un total de 7 capuchas superpuestas una encima de la otra que le concedían la invisibilidad durante los combates que protagonizó.

Encapucharse la cabeza significa mucho más que volverse invisible, ya que el hecho de desaparecer puede ser sinónimo de morir. En las ceremonias iniciáticas solemos ver que los candidatos suelen estar encapuchados. Entre los nandis del Africa oriental, los noveles circuncisos tienen que recorrer un largo trayecto que lo realizan vestidos con grandes sombreros en forma cónica manufacturados con altas y largas hierbas.

Los dioses, brujos, demonios y genios suelen presentarse encapuchados en muchas y variadas tradiciones. Parsifal con sus dos cabrones y los cabiros son un excelente ejemplo. Los cabiros son los demonios enigmáticos que la mitología nos presenta actuando como símbolo de los poderes desconocidos del espíritu.

C.G. Jung afirmaba que la capucha simbolizaba la esfera más elevada que ya se sitúa en el mundo celeste. Bajo este contexto, la capucha equivale a la bóveda y la campana.


Algunos autores relacionan la capucha con un símbolo fálico, pero bajo mi modesto punto de vista, la capucha es un símbolo femenino y la barretina o gorro frigio son símbolo masculino.  En la vestimenta tradicional de Cataluña podemos comprobar como son las mujeres las que están ataviadas con capuchas blancas, mientras que son los hombres los que llevan una senda barretina.

La famosa capucha roja que luce Caperucita Roja nos vuelve a recordar que la caperuza es un atributo femenino. La capucha de la mujer cristiana equivale al velo de la mujer islámica. La capucha en una mujer es muestra de honestidad, modestia y ocultamiento.

Los hombres cuando tienen que ponerse una forma cónica encima de su cabeza suelen preferir conos de grandes proporciones. Son unos conos tan grandes que ya no podemos llamarlos capuchas. El Mago Merlín y los hombres desfilando en Semana Santa son una buena muestra.


Una capa con una buena capucha es uno de los métodos más eficaces para no perder el calor corporal durante el otoño y el invierno. Los esquimales son expertos en utilizar la capucha para poder sobrevivir en las regiones árticas.

El misterio y la muerte también prefieren andar por la vida de forma encapuchada. Los Cuatro Jinetes de la Apocalipsis y la propia Parca suelen representarse con sendas capuchas. Los arcontes son otras de las entidades que suelen usar capa con capucha con el fin de "camuflar" que sus cuerpos no son de carne y hueso como el de los humanos.


El Profesor Corrado Malanga también nos habla en sus apasionantes conferencias de una raza extraterrestre que usa capucha. No es casualidad que el protagonista de la pelícua E.T. se escondiera de los humanos mediante una gruesa capa con capucha. La mayoría de grandes producciones cinematográficas suelen beber de fuentes de información que no están al alcance del mortal.

Una capa con capucha suele ser la indumentaria que algunos seres utilizan para poder ingresar en nuestra dimensión. En estos casos la capa y la capucha actúan de autentico contenedor mientras están "de visita turística" por nuestro planeta.

Últimamente a la moda de ir encapuchados se ha apuntado todo manifestante que se precie. Manifestarse a cara descubierta comporta demasiados problemas y todo dios prefiere usar una buena capucha. Es una excelente forma de enfrentarse a las fuerzas del orden, a sus gases y a sus jodidas pelotas de goma.



Johnny McClue 2018