miércoles, 26 de junio de 2019

Cuando Vilma no quiere abrir a Pedro,... rompe puertas marca ACME


De todos está en boca que el ser humano al descubrir la energía atómica, se dedicó a fabricar bombas atómicas con las que destruir, aniquilar, arrasar y asesinar. Pero este problema del homo sapiens ya viene de muy lejos. La mayoría de inventos y avances, primero lo usan los militares de turno y luego el resto de los mortales; el internet y los ordenadores son un buen ejemplo.

Cuando el hombre inventó la pólvora, pasó exactamente lo mismo. Tanto en China como posteriormente en Europa, la primera utilización que se le dio a la pólvora fue la militar. Hoy queremos compartir en este artículo unos ejemplos de hasta dónde puede llegar la estupidez del ser humano cuando no tiene Conciencia ni sabe que coño ha venido a hacer a este Mundo.

En la época de las fortalezas y los castillos, la entrada al recinto solamente tenía un solo acceso. Una buena y gruesa puerta era la que protegía el único lugar de acceso al castillo o fortificación. Para poder derrumbar puertas de castillos el hombre invento "la lapa explosiva".

Durante la persecución a la orden de los templarios, muchas puertas de acceso a comunidades templarias fueron derrumbadas por la "lapa explosiva" y la fuerza de la pólvora. Un solo hombre con una cerilla era capaz de destruir cualquier puerta blindada. 


El artefacto explosivo era colgado de la puerta como si de un cuadro se tratara y toda una serie de garfios metálicos quedaban adheridos a la puerta como si fueran auténticos arpones. Cuando la carga de pólvora explosionaba, los garfios penetraban en la madera de la puerta y se liaba la de dios En cuestión de segundos, la puerta se iba a tomar por el culo.


Los recaudadores de impuestos también se apuntaron a ser clientes de la "lapa explosiva" con el fin de que ningún castillo se negara a pagar los impuestos y cerrara la puerta al recaudador.


Pedro Picapiedra y su productora Hanna Barbera con este invento hubiera cambiado la historia de los Dibujos Animados.


El ser humano tiene un enorme poder creador y es capaz de inventar y construir cualquier cosa. Solamente hace falta que todo este poder sea destinado para hacer el bien. Ya va siendo hora de dejar de hacer el gilipollas.

Johnny McClue 2019


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